lunes, 17 de diciembre de 2012

Adriano evita un 'chelsea'

1.- Barcelona-Atlético de Madrid (Liga, jornada 16), 16 de diciembre de 2012, 4-1 (Falcao, Adriano, Busquets, Messi y Messi)

2.- Un gol de Adriano en el minuto 36 en la primera ocasión del Barcelona al poco de que Falcao adelantase a su equipo dio la vuelta a un partido que iba camino de convertirse en una pesadilla para los azulgranas. El Atlético encerrado en su campo, sin dejar un solo hueco por el centro y castigando cada pérdida de balón de su rival con peligrosísimas contras. El Camp Nou estaba padeciendo otro 'chelsea' en toda regla.

3.- Pero el inesperado zambombazo del lateral brasileño, su quinto gol en lo que va de temporada, tal vez la gran revelación del curso, desnortó al Atlético y metió en el partido al Barcelona. A partir de ahí se vio otra historia que nada tuvo que ver con la media hora inicial.

4.- El Barcelona impotente y plano del inicio pasó a partir de ese momento a avasallar a los rojiblancos con un fútbol muy ortodoxo. El eje Piqué-Busquets-Iniesta estuvo mayúsculo y Xavi y Messi comenzaron a encontrar espacios mientras Pedro y Alexis seguían abriendo el campo. Del Atlético nada más se supo. Ni peligro al contragolpe ni firmeza defensiva.

5.- Sin llegar a ser un Barça del todo redondo, en parte debido a la poca presencia de Pedro y a que Alexis empeora cada balón que llega a sus pies, los de Vilanova demostraron suficiente hambre, aplomo y contundencia para dar el golpe definitivo a la Liga.

6.- Piqué e Iniesta continuaron en su línea de excelencia de los últimos partidos. Pero mención aparte merece Busquets, el dominador del partido, no ya por el gesto técnico en su gol, que da la vuelta al marcador, sino por su omnipresencia siempre clarividente. No hubo balón dividido que no se llevase; no hubo jugada que no arrancara limpiamente tras pasar por sus botas.

jueves, 13 de diciembre de 2012

Vilanova con casi todo

1.- Córdoba-Barcelona (Copa del Rey, octavos de final, ida), 12 de diciembre de 2012, 0-2 (Messi y Messi)

2.- Vilanova colocó en el Nuevo Arcángel a un once que con Iniesta y Busquets por Thiago y Song tal vez sea el que se enfrente el domingo al Atlético de Madrid. Sorprendieron las pocas concesiones del técnico barcelonista. Puede que en su cabeza estuviera garantizarse, con una mayoría de titulares, un golpe definitivo  inicial para en todo caso poder rotar en la vuelta y liberar de esa manera el cargado mes de enero.

3.- Le costó al Barcelona, que jugó ciertamente con el freno de mano echado, controlar el partido ante el gran despliegue físico del Córdoba por todo el campo. Hubo que esperar hasta el segundo tiempo, cuando la presión de los califas fue decayendo, para que los azulgranas se sintieran cómodos con Xavi haciéndose notar.

4.- Piqué volvió a ofrecer una exhibición. Tanto en el aspecto defensivo, un valladar insuperable, como en el inicio del juego, con más importancia si cabe ante la ausencia de Busquets. En en una de esas arrancadas suyas con el balón cosido a los pies dejó solo a Messi delante del portero. El central que juega a su lado, esta vez Mascherano, queda eclipsado ante su deslumbrante momento de forma.

5.- El quejoso y desmoralizado Villa firmó un buen partido, ofreciéndose siempre al espacio desde la izquierda. Un trabajo poco vistoso pero de gran ayuda para sus compañeros.

6.- Otro doblete de Messi como si nada. Goles tras elaboradas jugadas colectivas en las que el argentino estuvo en el origen y el final.

lunes, 10 de diciembre de 2012

Récord de Messi y media hora de gran juego

1.- Betis-Barcelona (Liga, jornada 15), 9 de diciembre de 2012, 1-2 (Messi, Messi y Rubén Castro)

2.- Transcurrido el primer tercio de partido y con un marcador favorable de 0-2, parecía imposible que el Barcelona fuese a pasar apuro alguno en lo que quedaba de encuentro. Hasta ese momento sólo hubo un equipo sobre el Benito Villamarín. Los azulgranas se adueñaron del balón, se asociaron en cualquier parte y generaron una ocasión tras otra, con un Iniesta sublime y un Messi batiendo el récord de Müller. El Betis no levantó la voz, ni presionaba arriba ni se encerraba. Simplemente observaba el rondo del Barcelona.

3.- Pero el gol de Rubén Castro —despiste de Alba al tirar el fuera de juego— metió a su equipo en el partido. Los verdiblancos dieron un paso al frente y fueron a morder a la hasta entonces limpísima salida de balón del Barcelona. Y lo que quedaba de partido iba a ser un pequeño calvario para los de Vilanova, que perdieron el control y el ritmo del encuentro.

4.- Vilanova optó por el once de las últimas jornadas, con Iniesta por la izquierda y Xavi y Cesc de interiores. Pero, con la lesión de este último al poco de comenzar el choque, entró Alexis y el manchego pasó a una posición algo más retrasada.

5.- Adriano, esta vez de lateral derecho, completó un gran partido. Se está convirtiendo en un nuevo Abidal. Nadie podía imaginar hace apenas unos meses que fuese a dominar el idioma Barça. Y lo está logrando. Saca el balón desde atrás con enorme pulcritud. Una arrancada suya rompiendo una primera línea de presión del Betis estuvo en el origen del segundo gol del Barcelona.

6.- Alexis, que regresaba tras su lesión, dejó, como es habitual en él, claroscuros. Muy bien sin balón —su desmarque de arrastre facilitó el primer gol de Messi—, estirando el campo, generando espacios para sus compañeros; y confuso con el esférico en los pies.

7.- Piqué sigue en su línea ascendente. Imperial toda la noche.

jueves, 6 de diciembre de 2012

Frío y susto de Messi

1.- Barcelona-Benfica (Liga de Campeones, sexta jornada), 5 de diciembre de 2012, 0-0

2.- Frío pero ortodoxo partido de un Barcelona, que nada se jugaba, plagado de suplentes y de chicos del filial ante un Benfica que necesitaba la victoria para pasar a octavos.

3.- El Benfica salió a apretar muy arriba. Y al Barcelona, aunque es cierto que apenas rifó un balón, le costó salir limpiamente desde atrás. En ese sentido, Busquets tal vez sea el jugador más imprescindible de su equipo. Porque Song, que apuntaba maneras al comienzo de la temporada, no acaba de aprender el idioma Barça.

4.- Montoya y Planas ocuparon los laterales, con Puyol y Adriano en el centro de la defensa; Thiago y Sergi Roberto acompañaron al mencionado Song en el medio campo; y arriba Rafinha partió desde la banda derecha, Villa de nueve y Tello pegado a la banda izquierda.

5.- El Barcelona estuvo muy plano y concedió varias ocasiones claras de gol. Pinto fue el mejor hombre de los azulgranas.

6.- Mediada la segunda parte entró Messi, con el objetivo de superar el récord de Müller. Y no sólo no marcó sino que un golpe en su rodilla izquierda dejó cariacontecida a su hinchada. Se retiró en camilla. Luego se supo que todo ha quedado en nada.

7.- También saltó al campo Deulofeu, que dejó un par de acciones en forma de eslalon dignas del Messi de hace unos años.

domingo, 2 de diciembre de 2012

Vilanova ya tiene su once

1.- Barcelona-Athletic (Liga, jornada 14), 1 de diciembre de 2012, 5-1 (Piqué, Messi, Adriano, Ibai, Cesc y Messi)

2.- Partido relativamente cómodo para el Barcelona ante un Athletic con un planteamiento antediluviano, que sólo ofreció resistencia durante el primer cuarto de hora. Los marcajes individuales por todo el campo que ordenó Marcelo Bielsa generaron numerosos desajustes defensivos en su equipo. Y los azulgranas no los desaprovecharon.

3.- Vilanova parece haber dado con su once ideal. Hemos pasado de los extremos bien pegados a la cal a una propuesta sin posiciones tan claras en la que las bandas están para que lleguen los laterales, con Iniesta y Pedro, los teóricos extremos, moviéndose, cada uno en su estilo, por todo el frente de ataque.

4.- El heterodoxo planteamiento de Bielsa hizo que el Barcelona no desarrollara su juego en plenitud. Aunque el dominio culé fue incontestable, fue un partido más de jugadas que de juego continuado. Y algunas de esas jugadas fueron para que se queden grabadas en la retina de cualquier aficionado. En todos esos monumentos, generadas a partir de la asociación, la irrupción por sorpresa de los laterales, Adriano y Jordi Alba, fue decisiva. Resulta asombroso la influencia que tienen los dos laterales en prácticamente todos los partidos del Barcelona de Vilanova.

5.- Cesc, como compañero de Xavi, parece definitivamente consagrado como interior. ¡Quién lo iba a decir hace poco más de un mes!

6.- Piqué parece que se está entonando. Es una delicia cuando coge el punto de forma, tanto en su lectura del juego en defensa como en la limpieza que ofrece en el inicio del juego.


jueves, 29 de noviembre de 2012

Suma y sigue con la cantera

1.- Barcelona-Alavés (Copa del Rey, dieciseisavos de final, vuelta), 28 de noviembre de 2012, 3-1 (Viguera, Adriano, Villa y Villa)

2.- Vilanova aprovechó para dar descanso a los jugadores de más peso. Y los menos habituales, los que salen de lesiones y algunos canteranos tuvieron su oportunidad.

3.- La defensa, con Montoya, Puyol, Mascherano y Adriano, muy consolidada; Song ocupó el mediocentro, con Dos Santos y Sergi Roberto de interiores; Thiago hizo de Messi; y Tello y Villa ocuparon las bandas.

4.- Aunque el juego no fue deslumbrante, hubo detalles interesantes. Thiago se manejó bien en esa posición de falso nueve. Le sobra calidad y visión de juego pero le falta gol. Más adelante jugó de falso extremo izquierdo y de mediocentro. Sergi Roberto, sin llegar a firmar un partido deslumbrante, volvió a demostrar esa clase y elegancia que tanto le caracterizan. Gran zancada y mucho recorrido en el campo. En otros tiempos, sin balones de oro como Iniesta o Xavi, sería titular indiscutible en el primer equipo.

5.- Dos Santos demostró por qué Vilanova no cuenta con él. No es mal jugador, pero ante la feroz competencia que hay en ese puesto en el Barcelona es mejor que se busque la vida lejos del Camp Nou.

6.- Mediado el primer tiempo Villa pasó al centro del ataque y toda la banda izquierda quedó para Adriano. El problema para el Barcelona fue que Tello en la derecha ofrece una versión más limitada que cuando actúa en la otra banda.

7.- En la segunda parte saltaron al terreno de juego Planas, un lateral-central zurdo con fecha de caducidad, puesto que se ve emparedado entre Jordi Alba por arriba y el emergente Grimaldo por abajo, y Gerard Deulofeu, el controvertido genio de Ruidarenas, que en absoluto se cortó y dejó pinceladas de su talento a la hora de encarar a defensas desde cualquier parte del campo.

lunes, 26 de noviembre de 2012

La apoteosis del modelo

1.- Levante-Barcelona (Liga, jornada 13), 25 de noviembre de 2012, 0-4 (Messi, Messi, Iniesta y Cesc)

2.- Cuando Daniel Alves se lesionó en el minuto 13 de la primera parte y Martín Montoya saltó al campo sustituyéndole, el Barcelona, por primera vez en su historia, colocó sobre el terreno de juego a once futbolistas que en algún momento pasaron por la cantera del club: Valdés; Montoya, Piqué, Puyol, Alba; Xavi, Busquets, Cesc; Pedro, Messi e Iniesta.

3.- Hay algún matiz. Iniesta con 12 años y Messi con 13 llegaron al Barcelona con bastante fama provenientes de las canteras del Albacete y de Newell's, respectivamente; Pedro fue incorporado en edad juvenil; Piqué y Alba tuvieron que triunfar fuera para reparar en ellos; Cesc se fue porque veía tapada su progresión y alcanzó el reconocimiento mundial con Wenger... Pero en cualquier caso, esos once jugadores que se juntaron en el Ciudad de Valencia llevan interiorizado el ADN Barça. Bien porque lo aprendieron de pequeños y lo enriquecieron posteriormente con sus experiencias en otros equipos, bien porque lo adquirieron de mayores y lo incorporaron a su bagaje; o bien porque llevan prácticamente toda la vida en Can Barça. Todos ellos son jugadores con un perfil Barça muy marcado.

4.- Vilanova, satisfecho por el partido en Moscú del martes pasado, insistió en la misma idea de juntar a Xavi, Cesc e Iniesta, colocando al manchego de falso extremo izquierdo. Y aunque creemos que Iniesta brilla más como interior puro, el partido que firmó ayer puede que nos quite la razón. Cerca del área regaló tres pases de gol y marcó un tanto.

5.- Realmente, esta nueva versión del Barcelona, salvo en el caso de los centrales y el mediocentro, rehuye de las posiciones fijas. Y también del vértigo de principio de temporada. Ha vuelto la calma, la asociación permanente y el agrupamiento. 

6.- En la primera parte los de Vilanova controlaron el ritmo sin crear excesivo peligro. Pero todo apuntaba a que el Levante acabaría hincando la rodilla. Y así fue. El Barcelona, tras el 0-1, jugó a placer. Con momentos incluso en los que daba un pequeño paso atrás para que el Levante picara el anzuelo y generase esos espacios que tanto agradecen Messi, Cesc y compañía.

7.- Víctor Valdés, no sólo por el penalti parado, parece que va retomando el nivel perdido. En los últimos partidos ha realizado varias intervenciones de mérito y ha recuperado la confianza en el juego con los pies.

miércoles, 21 de noviembre de 2012

Primorosa primera parte del Barcelona

1.- Spartak de Moscú-Barcelona (Liga de Campeones, quinta jornada), 20 de noviembre de 2012, 0-3 (Alves, Messi y Messi).

2.- La alineación resultaba sospechosa. Parecía un politequeo para dar cabida a Xavi, Cesc e Iniesta a costa de renunciar a un delantero —Villa, Tello o el lesionado Alexis— en la banda izquierda. Así ocurrió, por ejemplo, en el partido contra el Madrid hace mes y medio. Y el resultado, en aquella ocasión, fue muy decepcionante.

3.- Pero esta vez, por lo visto, estaba más trabajada la idea. Y la consecuencia fue una exhibición que duró 45 minutos. El Barcelona no sólo tuvo el control, como era de esperar teniendo en cuenta la cantidad de centrocampistas con los que contaba, sino que logró la profundidad que se echó en falta las otras ocasiones en las que había optado por esa propuesta.

4.- A partir de la perfección del eje defensivo —Piqué y Mascherano y delante de ellos Busquets—, los azulgranas se desataron con un fútbol total en el que no había posiciones fijas. Alves y Alba, tanto en el inicio como en el final de las jugadas, aparecían por fuera y el resto de jugadores se mezclaba por dentro. Messi dejaba a Pedro solo delante del portero. Y en la siguiente acción era el canario el que habilitaba al astro argentino. Y, mientras, Xavi, Cesc e Iniesta tocaban y tocaban generando constantes superioridades. Fue algo portentoso. Las paredes, las triangulaciones, los desmarques a la espalda de la defensa rival... Todo fluía con naturalidad.

5.- El Barcelona bajó el pistón tras el descanso. Y el segundo periodo no tuvo más historia que la entrada al campo apenas unos minutos antes de que acabara el partido del prometedor Gerard Deulofeu en sustitución de Pedro. Están llamados a repartirse el extremo derecho del Barça durante los próximos años.

domingo, 18 de noviembre de 2012

El Zaragoza discute al Barcelona

1.- Barcelona-Zaragoza (Liga, jornada 12), 17 de noviembre de 2012, (Messi, Montañés, Song y Messi)

2.- Vilanova planteó el partido desde la absoluta ortodoxia, con la excepción del sancionado Busquets, que dejó su puesto a Song. Montoya y Alba en las alas, con Piqué y Puyol en el centro; Xavi, Messi e Iniesta por dentro; y Pedro y Villa pegados a la cal, abriendo espacios para sus compañeros.

3.- Pero el Barcelona en pocas fases consiguió someter al Zaragoza, que se presentó con valentía: defensa adelantada, presión alta y voluntad de tener el balón. A los azulgranas les costó dominar y crear ocasiones.

4.- Messi como factor diferencial en días de cierto plomo. Dos goles y un pase de la muerte que materializó Song. Sus dos tantos, tras recibir un pase perfecto del lateral, de Alba en el primero y de Montoya en el segundo, fueron un prodigio de definición. Lo que más llama la atención es la naturalidad con la que marca muchos de sus goles. Todo es armonía. Da la impresión de que es sencillo hacer lo hace.

5.- Xavi sigue en gran forma. Lleva casi toda la temporada en su mejor versión. Ofreciéndose, protegiendo el balón, haciendo avanzar a su equipo de manera compacta y serena, descargando el juego... Una delicia.

jueves, 8 de noviembre de 2012

Nada que reprochar al Barcelona

1.- Celtic-Barcelona (Champions, cuarta jornada), 7 de noviembre de 2012, 2-1 (Wanyama, Watt y Messi)

2.- Quintaesencia de los planteamientos que, particularmente en la Liga de Campeones, el Barcelona tiene que soportar: el Celtic metido no ya en su campo sino en su área. Eso es lo que ha conseguido el equipo azulgrana, cuyo juego, incontenible si encuentra espacios entrelíneas, ofrece la excusa perfecta para que sus rivales no tengan empacho en afrontar partidos de esa manera tan legítima como miserable.

3.- Poco que destacar. Los de Vilanova jugaron prácticamente al borde del área del Celtic. Chutaron dos veces al palo y Fraser Forster, el portero de The Bhoys, volvió a ser un héroe. Al final del primer tiempo la posesión del Barcelona alcanzaba un escandaloso 87%.

4.- Bartra y Mascherano cerraban; Song, Xavi e Iniesta ocupaban la zona central; y Alves, Pedro, Messi, Alexis y Alba se peleaban en el fango de piernas del equipo escocés. En el segundo tiempo Villa entró por Alexis y más adelante Piqué y Cesc por Bartra y Song. Pero ni por esas. Tal vez el Barcelona hubiera necesitado que Cesc entrara antes. O el desborde de Tello desde la izquierda. Da igual. Si ganó el Celtic el encuentro fue porque se disputó en Paradise, lugar donde los milagros son posibles. Porque, hay que decirlo, planteamientos como el de Neil Lennon están condenados al fracaso la inmensa mayoría de las veces que se ponen en práctica.

5.- Birthday Bhoys (el Celtic celebraba anoche su 125º aniversario) beat the best team in the world, así titula la web del Celtic la crónica del partido.

domingo, 4 de noviembre de 2012

El intervencionismo de Vilanova

1.- Barcelona-Celta (Liga, jornada 10), 3 de noviembre de 2012, 3-1 (Adriano, Bermejo, Villa y Alba).

2.- Encuentro muy irregular del Barcelona, con una primera parte interesante y bien jugada y un segundo periodo muy anodino tirando a soporífero.

3.- Salió Vilanova por primera vez en la temporada con un 3-4-3, con Adriano, Mascherano y Alba cerrando; Busquets, Xavi, Iniesta, Messi y Cesc en el medio; y Pedro y Villa bien abiertos en las bandas. Tenía muy buena pinta el Barcelona. Pero no tardó su entrenador, descontento con el peligro que estaba generando el Celta a la contra, en colocar a Busquets de central y regresar a los cuatro defensas.

4.- Lo cierto es que a partir del cambio táctico los azulgranas se sintieron más a gusto, con los laterales descolgados y generando peligro. Así llegó el primer gol del Barcelona, una aparición de Adriano por dentro, que abrió a Pedro y llegó al remate al primer palo. O el segundo, una irrupción de Jordi Alba, que conectó con Villa y se plantó delante del portero celtista, al que regateó con enorme categoría.

5.- Cesc, como en los dos últimos partidos en su versión calmada, marcó el ritmo de su equipo. Ha sufrido una transformación en apenas quince días. Cosas del fútbol.

6.- Gran partido de Villa, que está poco a poco retomando su nivel de hace dos temporadas. Todas sus decisiones fueron acertadas. Firmó, tras una combinación maestra con Iniesta, un gol para enmarcar. Siempre desde el costado izquierdo, sus movimientos sin balón y sus combinaciones de primeras, son oxígeno para su equipo.

7.- Tras el descanso entró Bartra, que volvió a cumplir sobradamente, por Cesc; y Busquets pasó de nuevo al medio. Pero el Barcelona jugó esos segundos cuarenta y cinco minutos sin ninguna chispa, muy apagado, dejándose llevar.

8.- Messi, no sabemos si un poco atribulado por su reciente paternidad, estuvo especialmente desesperante, obcecado y egoísta. Una de sus peores versiones.

miércoles, 31 de octubre de 2012

Poca chicha

1.- Alavés-Barcelona (Copa del Rey, dieciseisavos de final, ida), 30 de octubre de 2012, 0-3 (Villa, Iniesta y Cesc)

2.- Era un partido para que Vilanova hubiera arriesgado con una alineación plagada de suplentes y con todos los jugadores del filial que el reglamento permite. Pero salieron de inicio Alves, Mascherano, Busquets, Iniesta, Cesc, Alexis y Villa. Los atractivos fueron únicamente Bartra y Sergi Roberto. Completaron el once un consolidado Montoya, esta vez como lateral izquierdo, y Pinto.

3.- En cuanto a lo posicional, Cesc hizo de Messi; y Alexis desde la derecha y Villa desde la izquierda enfocaban siempre el centro y dejaban las bandas a los laterales. El Barcelona jugó muy sereno, tirando de su clásico manual, metido en el encuentro desde el inicio, sin ofrecer ninguna duda a pesar de que el rival, de 2ªB, invitaba a la relajación.

4.- Aunque Alves puso un muy buen balón a Cesc en el tercer gol del Barcelona, su manera de jugar, tan poco sistemática, perjudica claramente a su equipo. Esos centros a la olla sin ningún sentido... Montoya merece ser el titular de la banda derecha.

5.- Sergi Roberto no tuvo mucha presencia en el partido, pero dejó algunos detalles. Aroma de jugador de clase. Es todo elegancia. Su problema es que en estos momentos pelea por un puesto con Xavi, Iniesta, Cesc y Thiago.

domingo, 28 de octubre de 2012

Los pelotazos de Valdés

1.- Rayo-Barcelona (Liga, jornada 9), 27 de octubre de 2012, 0-5 (Villa, Messi, Xavi, Messi y Cesc)

2.- La valiente propuesta del Rayo, anunciada la víspera por Paco Jémez —me encierre o salga a por ellos, lo normal es que acabe perdiendo, así que voy a ser fiel a mi idea de fútbol, vino a decir—, condicionó el juego del Barcelona, muy serio todo el partido. Y muy oscuro.

3.- El Rayo salió a morder, muy arriba, defensa adelantada y voluntad de querer el balón, a los azulgranas. La respuesta de Vilanova fue ordenar a Valdés jugar siempre en largo. No quería asumir ningún riesgo sacando el balón limpio desde atrás. Trataba el técnico culé de capear la esperada salida en tromba de los vallecanos y que el transcurrir de los minutos fuera minando las fuerzas de su oponente.

4.- Y así fue. Esta vez el problema del Barcelona no fue la renuncia a la pausa y al control en beneficio de la verticalidad de Cesc —que firmó un extraordinario partido, dicho sea de paso. La razón de la dificultad que se encontró el conjunto azulgrana estuvo en que no halló espacios en la elaboración ante una presión en todo el campo y una defensa tan adelantada como la de los rayistas.

5.- En otros tiempos habríamos visto a los defensas del Barcelona, a la hora de afrontar una situación como la de anoche, sacar el balón jugado desde su área. Pero Vilanova, al menos por ahora, no quiere correr ese tipo de peligros. La consecuencia fue que Valdés pegó más pelotazos que en toda la temporada pasada.

6.- El Rayo, conforme avanzaba el encuentro, se fue apagando. Y el Barcelona únicamente esperó su momento. Los espacios, y los goles, parecía que le caían del cielo. Pero no nos engañemos. Es mérito del Barcelona conseguir que el rival asuma un desgaste tan brutal de inicio aun a sabiendas de que ese planteamiento le va a acabar condenando en el tramo final.

7.- En las no muchas ocasiones en las que el Barcelona logró apoderarse del balón surgió la figura de Cesc Fábregas. Más pausado que de costumbre y cada vez menos falso 9 y más interior, dio un recital de clase y visión de juego. Enorme despliegue el suyo, coronado con dos pases de gol y un tanto.

8.- Los laterales gozaron de menos presencia en ataque que habitualmente, pero tanto Montoya como Alba resultaron decisivos con sus pases desde la línea de fondo, levantando la cabeza, que supusieron el segundo y el tercer gol de su equipo.

9.- Villa y Pedro salieron muy fortalecidos. Pegados a la cal, cada uno en su estilo, fueron una amenaza constante para la defensa franjirroja. El asturiano, que poco a poco va recuperando la chispa, con sus desmarques en profundidad —y su olfato de gol, que tan en evidencia deja a Alexis—; y el canario, en un gran momento de forma, con su tremendo sacrificio y su increíble punta de velocidad. Fueron un desahogo permanente para el juego azulgrana

miércoles, 24 de octubre de 2012

Sin Cesc regresa la ortodoxia

1.- Barcelona-Celtic (Champions, jornada 3), 23 de octubre de 2012, 2-1 (Mascherano -p.p.-, Iniesta y Alba).

2.- Volvieron Xavi e Iniesta a la dirección y el Barcelona recuperó sus viejos valores futbolísticos. El juego posicional, el control, la pausa, sacar el balón limpio desde atrás... la ortodoxia que le hace tan reconocible y de la que de manera inquietante se estaba alejando en las últimas semanas.

3.- El partido contra el conjunto escocés lo hemos visto muchas veces: el rival planta dos líneas en su área y el Barcelona se ve obligado a hacer un descomunal ejercicio de paciencia. Y así fue, en ningún momento, a pesar de las dificultades que suponía atacar a una defensa así, le dio a los azulgranas por desesperarse y acudir a otras maneras más directas de llegar al gol.

4.- Aunque la remontada no se consumó hasta el descuento, el Barcelona mereció la victoria desde mucho antes. Foster, el meta del Celtic, se marcó el partido de su vida, con al menos tres paradas prodigiosas. Vilanova, aunque la situación parecía requerir un golpe de timón, no tocó en ningún momento el dibujo, prueba de que se trataba únicamente de seguir insistiendo por la misma vía.

5.- Los dos goles de los azulgranas fueron muy significativos. El primero, una obra de arte, una combinación al borde del área de Messi, Iniesta y Xavi culminada por el manchego. Una exaltación de las mejores virtudes de este equipo: la asociación, el ir avanzando a la espalda de las líneas del rival y la excelsa técnica individual para manejarse sin apenas espacio y tiempo. Y el segundo, un centro del lateral derecho rematado por el lateral izquierdo, prueba inequívoca del fútbol total.

6.- Extraordinario debut del tan reclamado Marc Bartra. Acompañó a Mascherano como central derecho. Se anticipó siempre. Y las pocas veces que tomó la iniciativa para sacar el cuero lo hizo con pulcritud. Ni un sólo error en todo el partido. Incomprensible que Vilanova se lo haya pensado tanto con él. Como central es mejor que Song o Adriano de aquí a Lima. Habrá que ver, de cara al futuro, si mezcla bien con Piqué.

domingo, 21 de octubre de 2012

El Barça de Cesc es menos Barça

1.- Deportivo-Barcelona (Liga, jornada 8), 20 de octubre de 2012, 4-5 (Alba, Tello, Messi, Pizzi -p-, Bergantiños, Messi, Pizzi, Messi, Alba -p.p.-)

2.- Varios partidos dentro de un mismo encuentro. Hasta el 0-3, incluso hasta el 3-4, el Barcelona de la pegada y la verticalidad, del galope, un martillo que cada vez que llega marca, con Cesc, regalando tres pases de gol, de capitán general; a partir de la expulsión de Mascherano y la consiguiente salida de Cesc y entrada de Xavi al campo, vemos al Barcelona del control, de la posesión coma arma para desarmar al rival, del juego pausado y sereno y del dominio a pesar de contar con un hombre menos; y tras el 4-5, en los minutos finales del encuentro, el Barcelona del tembleque, de los miedos, de la falta de confianza en sus posibilidades, del pelotazo como recurso en situación de apuro.

3.- La soberbia actuación de Cesc, muy de highlights, no debe ocultar las disfunciones que genera su presencia en el juego de su equipo. Con él al mando, el Barcelona pierde el control del juego. No somete al rival, no lo desgasta a base de empotrarlo en su área, deja de coleccionar pases para dedicarse a llegar a la portería contraria de manera torrencial, con excesiva verticalidad. Eso supone que el oponente no llegue a descomponerse, no se desordene y, por tanto, esté en disposición de hacer daño en sus ataques. Y los partidos son más de ida y vuelta de lo que la configuración del Barcelona admite.

4.- Decepcionó Vilanova colocando a Messi de inicio. Aunque el enésimo festival del astro argentino parezca que nos quita la razón, la única manera de que Messi llegue fresco a abril y mayo es descansando en este tipo de encuentros, disputados tras un largo viaje y dos partidos con su selección.

5.- A pesar de las ausencias de Alves, Piqué, Puyol y Abidal, la teórica defensa titular, Marc Bartra sigue sin contar para Vilanova, que decidió colocar en el centro de la zaga a unos anoche muy anodinos Mascherano y Song. Las novedades estuvieron en la delantera: Tello jugó por primera vez en la derecha, y dejó su sello con una acción de mucha categoría en su gol, y Villa fue titular, pero pasó totalmente desapercibido.

6.- Valdés, por orden de su entrenador, ya no saca un solo balón jugado. Peligrosa deriva la que está tomando Vilanova.

lunes, 8 de octubre de 2012

Vilanova desdibuja al Barcelona

1.- Barcelona-Madrid (Liga, jornada 7), 7 de octubre de 2012, 2-2 (Cristiano, Messi, Messi y Cristiano)

2.- Por primera vez en mucho tiempo el Barcelona se acomplejó ante el Madrid. Fue en la primera media hora de partido, tal vez los minutos más decepcionantes del conjunto azulgrana desde que Guardiola se hizo cargo del equipo hace más de cuatro años. Vilanova perpetró una alineación y un plan de juego desde el temor a la pegada del Madrid. Se traicionó a sí mismo y, lo que es peor, traicionó una idea y un legado que parecían irrenunciables.

3.- Aunque lo más llamativo fue la colocación de Adriano en el centro de la defensa en detrimento de Song —renunciar a una salida limpia de balón en favor de mayor rapidez defensiva—, probablemente sus decisiones más graves fueron prescindir de un delantero —Alexis, Villa o Tello— en la banda izquierda para colocar ahí a Iniesta, lo que restaba profundidad al juego azulgrana, y ordenar que no se asumiera ningún tipo de riesgo a la hora de sacar el balón desde atrás, con lo que los jugadores azulgranas se vieron condenados a pelear los balonazos de Valdés.

4.- Los miedos de Vilanova desconfiguraron a un Barcelona mal plantado, que se veía incapaz de llegar siquiera a la zona de tres cuartos con el cuero controlado. La única propuesta eran balones largos a los desmarques de Cesc. La banda izquierda era un desierto clamoroso. Los laterales no llegaban. Y Busquets, Xavi e Iniesta se veían sobrepasados por el marasmo que generó su entrenador.

5.- Al Madrid, comandado por un gran Özil, no le costó aprovechar los complejos de su rival. El Barcelona, sin orden y ortodoxia, y, por tanto, sin balón, se convierte en un equipo intrascendente. El mediapunta turco, Benzema y Cristiano estaban desatados. Los merengues no sólo se adelantaron en el marcador sino que pudieron dejar sentenciado el partido en esos primeros treinta minutos.

6.- Pero fruto de la casualidad, sin merecimiento alguno, Messi empató el partido tras un churro de jugada. El Madrid acusó tan injusto golpe y ya no se recuperó.

7.- Poco a poco el Barcelona, mal que bien, se fue haciendo con el balón. En el segundo periodo se vio ya a un Barça más reconocible. El esférico, no sabemos si de manera deliberada, empezó a salir limpio desde la defensa. Los centrocampistas azulgranas, con Messi a la cabeza, fueron imponiendo su ley. Y la banda izquierda comenzó a ser ocupada, con las subidas de Alba, primero, y la entrada de Alexis, después.

8.- El Madrid apenas volvió a dar señales de vida. A pesar de los ocho puntos de desventaja y de que el empate no era un buen resultado, Mourinho parapetó a su equipo en su campo a la espera de cazar alguna contra.

9.- Un mundo separaba al Barcelona timorato que empezó el partido del valiente y orgulloso que lo terminó, encerrando al Madrid y generando ocasiones de gol.

miércoles, 3 de octubre de 2012

Luminosa segunda parte del Barcelona

1.- Benfica-Barcelona (Champions, jornada 2), 2 de octubre de 2012, 0-2 (Alexis y Cesc)

2.- El Barcelona, tras una primera parte de cierto descontrol, demasiado de ida y vuelta —Valdés salvó dos goles—, con poca calma, firmó un estupendo segundo periodo en Da Luz, con un juego más compacto, madurando interminables posesiones, sin permitir que el rival saliera de su campo.

3.- El Barça del principio es el de Cesc: aceleración permanente, incesantes desmarques verticales, abuso del balón largo en profundidad, paso atrás en defensa para que el rival se adelente y haya lugar a rápidas transiciones... Y el del final es el de Xavi: agrupamiento en torno al balón, orden en las posiciones, pausa, juego masticado...

4.- Messi lleva cuatro pases de gol en los últimos dos partidos. Y ningún tanto. Otra manera de demostrar jerarquías.

5.- Jordi Alba, tan alejado de los focos, tan poco ruidoso, es un futbolista extraordinario. Hace muchas cosas y todas bien. Abarca todo el costado. Desdoblando al extremo y ganando la línea de fondo es un cañón —y sus centros siempre llevan veneno. Pero además saca el balón desde atrás con pulcritud y es capaz de dar continuidad al juego como si de un interior se tratara. No rifa la pelota ni a tiros. Es un tesoro para este Barcelona. Tal vez el mejor ala izquierda del mundo.

6.- Llamativa —y difícilmente justificable— confianza de Vilanova en Alexis y Alves. Sus recientes actuaciones aconsejaban un paso por la nevera, y más teniendo en cuenta que gente como Villa y Montoya necesita minutos. Alexis, al menos, se resarció con una buena actuación. Pero Alves parece definitivamente perdido para la causa.

7.- Increíble la mala suerte de Puyol con las lesiones. Su ausencia en el clásico del domingo es trascendente. La pareja que forma con Piqué es casi sinónimo de exhibición azulgrana contra el Madrid: estuvieron en el 5-0 de hace dos temporadas y en el 1-3 de Liga y el 1-2 de Copa de la pasada. En cambio, en las derrotas del Barcelona en los clásicos, siempre faltó alguno de los dos: en la final de Copa de Mestalla, en el 1-2 en el Camp Nou de la pasada Liga y en el 2-1 de la vuelta de la reciente Supercopa.

domingo, 30 de septiembre de 2012

El mismo guión

1.- Sevilla-Barcelona (Liga, jornada 6), 29 de septiembre de 2012, 2-3 (Trochowski, Negredo, Cesc, Cesc y Villa).

2.- Aunque con algún matiz, ya habíamos visto este partido del Barcelona hasta en tres ocasiones en lo que llevamos de temporada —en Pamplona y frente al Spartak y el Granada. Primera parte superficial, de dominio estéril, sin ningún mordiente; marcador en contra; y reacción final de la mano de un cambio táctico, encerrando al rival en su área.

3.- El Barcelona controló el partido durante la primera media hora, con un Sevilla muy atrás. Pero es ese tipo de dominio funcionarial, dejándose llevar, con escaso nervio competitivo. Los de Nervión hacían daño a la contra. En una de esas, un mal despeje de Mascherano y la escandolasa pasividad de Alves a la hora de encimar al rival, propiciaron el primer gol sevillista.

4.- Todo el juego azulgrana trancurría por el centro, con mucha presencia de Xavi y Messi. Las bandas resultaban intrascendentes, con los extremos en su peor perfil: Alexis en la derecha y Pedro en la izquierda; y los laterales sin acabar de llegar: Alba porque acusaba su inactividad y Alves, cuyo estado de forma es infame, porque está en otras historias.

5.- Tras la reanudación, el Barcelona encaja el segundo. Busquets pierde un balón en la divisoria y Negredo hace que salten las costuras de Song como central. Nos sigue pareciendo incomprensible la defesetración de Bartra.

6.- A partir de ese momento surge el gran Barça, espoleado por, ocho meses después, un gol de Cesc. El Sevilla ya no saldría prácticamente de su campo. Empieza a aparecer un omnipresente Alba, desdoblando a Alexis, que volvió a la izquierda, su banda menos mala. Las ocasiones se suceden por ese costado. Pedro, desde el otro lado, comienza a ser dañino para la defensa rojiblanca.

7.- Parecía mentira que el Barcelona no consiguiera empatar. La expulsión de Medel reforzó al Sevilla en su plan de encerrarse y rompió la dinámica de fluidez del Barcelona.

8.- Vilanova, al sentar a Alves y dar entrada a Villa, echó nuevamente mano del 3-4-3  —menos mal que, según muchos conspicuos comentaristas, el actual técnico azulgrana nunca iba a recurrir a ese tipo de guardioladas. Anteriormente ya había saltado al campo Tello por Alexis. Con los extremos muy abiertos y las piernas de los defensas hispalenses sin oxígeno, comenzaron a surgir los espacios interiores para Xavi y Messi. Y Cesc y Villa, habilitados por el argentino en dos acciones al borde del área muy parecidas, ejecutaron al Sevilla sobre el pitido final.

9.- Desconocemos si este guión que tanto se repite, desgaste inicial del rival para rematarlo a última hora, obedece a un plan o es fruto del caprichoso devenir de los partidos. Sea como fuere, el Barcelona debe recuperar el piloto automático del juego ordenado y ortodoxo, con un punto más de ardor, desde el comienzo de los encuentros. Una de las soluciones pasa por liquidar a elementos, que por unas causas o por otras, resultan nocivos a la hora de desarrollar el juego que ha hecho célebre a ese equipo.

domingo, 23 de septiembre de 2012

Dr. Tito y Mr. Vilanova

1.- Barcelona-Granada (Liga, jornada 5), 22 de septiembre de 2012, 2-0 (Xavi y Borja Gómez -p.p-)

2.- Como ante el Spartak hace tres días, el Barcelona volvió a ofrecer dos caras. Durante una hora larga se mostró plano, soso, sin pizca de gracia. Era el Barça de un infame Alves, el de los cuatro defensas ante un rival que se encierra, el del intrascendente Cesc en el medio campo, el de Alexis y Villa como supuestos extremos... Y en el tramo final se vio al equipo con el que se identifica el aficionado: tres defensas cerrando más allá de la divisoria y extremos puros bien abiertos.

3. El cambio al 3-4-3, con la entrada de Pedro —cada vez más extremo eléctrico y punzante— y Tello y el paso de Alexis a la punta del ataque, fueron decisivos. El tedio inicial, originado a partir de la mala ubicación de varios jugadores y a lo anodino de la propuesta, dio paso a un Barcelona muy reconocible, que comenzó a crear ocasiones sin cesar —Toño, el portero del Granada, firmó una actuación memorable—, siempre a partir de las bandas, hasta que llegó el postrero gol de Xavi —que entró en la segunda parte por un poco afortunado Thiago—, cómo no, tras un centro de Pedro desde el costado derecho.

4.- En ese ataque máximo final, con todos los jugadores azulgranas, salvo Valdés, instalados poco menos que en el área rival —lo que dio pie a que el Granada organizara alguna contra que pudo acabar en gol—, el papel como desatascadores de Xavi y Busquets, con su juego clarividente, de primeras, dándole velocidad al balón, resultó fundamental.

5.- Con un Messi muy ofuscado, el Barcelona está echando especialmente de menos la figura de Andrés Iniesta.

6.- Volvió a decepcionar Vilanova con Bartra. Optó nuevamente por Song como acompañante de Mascherano en el centro de la defensa. Complicado el panorama que se le presenta al talentoso central tarraconense.

jueves, 20 de septiembre de 2012

El Chelsea crea escuela

1.- Barcelona-Spartak de Moscú (Liga de Campeones, jornada 1), 19 de septiembre de 2012, 3-2 (Tello, Alves -p.p-, Romulo, Messi y Messi)

2.- El Spartak de Unai Emery calcó el planteamiento que el Chelsea ofreció en la pasada semifinal de la Champions. Defensa al borde del área, líneas muy juntas y un único objetivo: cerrar espacios interiores aun a costa de regalar las bandas. Y pillar alguna contra, claro.

3.- Y el Barcelona, aunque se adelantó en el marcador —como le sucedió contra los blues hace cinco meses—, no se encontró cómodo hasta el arreón final. Durante una hora, asistimos a la peor versión de Messi: ofuscado, autista, desenchufado, eligiendo la peor opción... Y cuando Messi entra en crisis, el Barcelona lo acusa. No encontraba el rosarino ningún metro, asfixiado como estaba por un sinfín de piernas rivales. Y su equipo carecía de ritmo y fluidez.

4.- Vilanova se olió la que le iba a preparar Emery y clavó a Pedro y a Tello en las bandas, para estirar el campo. Pero ni por esas. Hacía falta una vuelta de tuerca y ésta llegó cuando se adelantaron los rusos tras la reanudación. El técnico azulgrana rescató el célebre —y muy injustamente denostado— 3-4-3. Sobraban defensas y faltaba gente arriba. Salió Alves y entró Alexis. Y el Barcelona se transformó. Los extremos comenzaron a encontrar referencias en el área. Y así llegaron los dos goles de la remontada, centros desde la derecha de Pedro, recogidos por el extremo de la otra banda, Tello, primero, y Alexis, después, que buscaron a Messi para que sellara la victoria.

5.- Con el regreso de Messi al once inicial y ante la baja de Iniesta, Cesc volvió a jugar de interior. Y volvió a ser invisible. Sólo con acciones esporádicas irrumpiendo en el área, con desmarques muy verticales, ganaba algo de protagonismo.

6.- Tello fue decisivo. Veníamos señalando su gran momento de forma, premiado con la confianza de su entrenador. Marcó un primer gol muy suyo, con recorte hacia dentro y balón con rosca al segundo palo, y firmó una jugada de primer nivel en el 2-2, con un regate en un palmo, ganando la línea de fondo y regalando un pase de la muerte a Messi. Lástima que a pesar de desenvolverse sólo por la izquierda tenga la zurda únicamente para apoyarse.

7.- Alexis, por fin, jugó un buen partido. Todas sus acciones resultaron dañinas para la defensa moscovita, tanto por dentro como por fuera. Fue un revulsivo.

8.- Decepcionó un poco que Vilanova, tras la lesión de Piqué al poco de comenzar el partido, optara por Song en lugar de Bartra. El canterano necesita coger minutos. Y no parecía que el Spartak tuviera el ataque más peligroso de Europa como para andarse con tanta cautela con el central.

9.- Nueve canteranos de partida —diez el pasado sábado en Getafe.

domingo, 16 de septiembre de 2012

Valiente Vilanova

1.- Getafe-Barcelona (Liga, jornada 4), 15 de septiembre de 2012, 1-4 (Adriano, Messi -p-, Messi, Sarabia y Villa)

2.- Vilanova cuestionó el dogma que instauró Guardiola: la titularidad de Messi. Hay vida más allá del astro argentino, y más cuando éste viene de una gira por Sudamérica. Cesc, en su mejor partido de la temporada, hizo de Messi. Es la posición en la que más a gusto se encuentra, entre líneas. En la selección española juega siempre ahí.

3.- El técnico del Barcelona también se atrevió a sentar a Alves, suplido por un Montoya cada vez más solvente. Vilanova piensa en grande, a largo plazo. No se cansa de rotar a jugadores en las alineaciones con el objetivo de que lleguen frescos a abril y mayo.

4.- Reapareció, a un altísimo nivel, Thiago Alcántara. Un excelso Xavi y él se apoderaron de un partido que el Barcelona controló de cabo a rabo. Con los extremos, Pedro y Tello, bien abiertos, otra seña de identidad de Vilanova, los espacios interiores surgieron con naturalidad.

5.- Tello cada vez interviene menos con balón, pero sus apariciones van ganando en rigor. Es un puñal en el costado izquierdo.

6.- El desarrollo del encuentro, prácticamente todo lo que sucedió en el Coliseum Alfonso Pérez, fortalece la figura de Vilanova.

lunes, 3 de septiembre de 2012

Las dudas típicas de inico de temporada

1.- Barcelona-Valencia (Liga, jornada 3), 2 de septiembre de 2012, 1-0 (Adriano)

2.- Partido un tanto mohíno del Barcelona, con unos primeros 45 minutos más que decentes pero sin excesiva chispa arriba y un segundo tiempo en el que fue incapaz de imponer su juego, aunque bien es verdad que no pasó excesivos apuros.

3.- Vilanova sigue con las rotaciones. Descansaron Alba, Busquets e Iniesta. Sus sustitutos no pasaron inadvertidos: Adriano marcó el gol; Song se estrenó como titular y pareció que llevara toda la vida en Can Barça, jugando siempre a uno o dos toques, permitiendo una salida muy aseada del balón, siempre bien colocado, sin abusar demagógicamente de su exuberancia física; y Cesc, aunque falló dos goles muy suyos, mostró una tímida mejoría en comparación con sus últimas e invisibles intervenciones.

4.- El Barcelona está arrancando y tardará en alcanzar su mejor nivel, pero Xavi está como una moto. Muy fresco, se asocia en cada rincón del campo, tal es el despliegue que está ofreciendo. La buena primera parte azulgrana se debió a él.

5.- Alexis volvió a demostrar las pocas virtudes que le adornan como extremo. Al contrario que con Guardiola, ya no se desmarca continuamente hacia el centro arrancando desde una banda, sino que vive en la cal. Y todos sus movimientos con el balón en los pies son muy previsibles e inanes. Villa, a nada que se entone físicamente, le debería quitar el puesto.

6.- El hecho de que los dos extremos jueguen tan abiertos genera un inmenso espacio para Messi, mayor todavía del que disfrutaba con Guardiola. Estamos ante un arma de doble filo. Por un lado, se sientan las bases para explotar en mayor medida si cabe el potencial del mejor jugador del mundo pero, por otro, se corre el riesgo de que absorba demasiado juego, cortocircuite el engranaje de pases de sus compañeros y aumente su tendencia a embolicarse.

7.- Valdés no ha recuperado la confianza perdida tras su pérdida de balón ante Di María. La solución no es sacar de puerta en largo. El juego del Barcelona debe volver a comenzar con un buen primer pase de Valdés. Aunque sea a costa de asumir determinados riesgos.

jueves, 30 de agosto de 2012

Las muchas lecturas de una noche de verano en Chamartín

1.- Real Madrid-Barcelona (Súpercopa, vuelta), 29 de agosto de 2012, 2-1 (Huguaín, Cristiano y Messi)

2.- El Madrid se llevó la Súpercopa tras un empate a cuatro goles en el cómputo total de los dos partidos. Pero eso es casi lo de menos comparado con la cantidad de jugo que se puede sacar al encuentro de anoche.

3.- Este Madrid es el mejor equipo del mundo, y probablemente uno de los mejores de siempre, en lo suyo: salir a morder con un Bernabéu encendido para aprovechar cualquier paso en falso del rival. Se trata de castigar el mínimo desliz, duda, error o falta de determinación del oponente. Los balones largos a la espalda de la defensa contraria tras una pérdida de balón son la especialidad de la casa. Pocas veces se ha llevado a cotas tan elevadas esa manera de entender el fútbol. Otra cosa es que, por mucho grado de virtuosismo que haya alcanzado el Madrid practicando ese fútbol, el aficionado se sienta realizado. Al mejor club del siglo XX y al de mayor presupuesto del XXI habría que exigirle que manejara unos registros distintos de los que utilizan los equipos de medio pelo.

4.- La caraja del Barcelona en la primera media hora, en la que encajó dos goles, Valdés recibió dos manos a mano y Adriano fue expulsado cuando derribó a un Cristiano que iba a colocar el 3-0, se puede explicar por el césped seco, la lesión a última hora de Alves y la consiguiente entrada sin calentar de Jordi Alba o el lastre que supone colocar a Alexis de extremo, pero todo eso queda en un segundo plano cuando un equipo que propone se enfrenta a otro que dispone. No puede ser fácil, cuando uno no esconde nada, jugar contra alguien que únicamente vive de machacar tus flancos desprotegidos, que sólo se legitima a partir de tus fallos y además, todo eso, llevado a cabo con una pulcritud y encomio máximos.

5.- El fútbol es mucho más que sumar ocasiones. La prueba es este partido. El Madrid pudo golear al Barcelona, sellar un marcador de escándalo a base de martillazos a la contra, pero el encuentro será recordado por el golpe de autoridad de los azulgranas tras esa primera media hora infernal, con un 2-0 en contra y diez jugadores. A partir de ese momento, lo que debería haber sido una apoteosis del Madrid se convirtió en la derrota más bella del Barcelona. Los hombres de Mourinho, ante el desconcierto de su parroquia, que exigía sangre y venganza, apenas consiguieron salir de su campo ni dar tres pases seguidos. Xavi, Iniesta y Messi tejieron un rondo inacabable por los pasillos interiores. Su ataque de orgullo cuando lo que pedía el cuerpo era protegerse del chaparrón y minimizar los daños, su coraje para querer imponer el estilo incluso en las peores circunstancias, y aun a riesgo de que la brecha fuera mayor, quedarán como uno de los grandes momentos de este equipo que trasciende resultados y títulos. El Barcelona, este Barcelona, es otra historia.

6.- Vilanova, en otro orden de cosas, ha perdido un título pero ha consagrado a dos laterales. Jordi Alba, que incomprensiblemente iba a ser suplente, y Martín Montoya, injustamente relegado hasta ahora al papel de cuarto lateral de la plantilla, reivindicaron su ADN Barça. La importancia de estos dos jugadores no es escasa, puesto que sus pares, Adriano y Alves, son dos cuerpos extraños en el ecosistema azulgrana.

7.- Buenos minutos de Alex Song, un pelotero con gran despliegue y salida muy limpia de balón. Su misión no es sencilla. Probablemente, tras Messi, Busquets sea el jugador con más difícil relevo del equipo. Pero por lo visto en el Bernabéu, da la impresión de que Song será un digno suplente del de Badía.

8.- La actuación del Barcelona desde la roja a Adriano entierra definitivamente toda la cháchara que generó la expulsión de Pepe en las semifinales de Champions de 2010. Quedarse con uno menos no es el fin del mundo. En aquella ocasión el partido marchaba 0-0, que no se olvide. Con el balón, se pueden reducir las consecuencias de jugar con diez. Pero sin él, cuando el fútbol se convierte en un ejercicio de presión marcial, la pérdida de un efectivo trastoca todos los planes. La culpa no fue de Stark.

lunes, 27 de agosto de 2012

Los problemas de Cesc y Alexis


1.- Osasuna-Barcelona (Liga, jornada 2), 26 de agosto de 2012, 1-2 (Llorente, Messi y Messi)

2.- Un partido entre dos duelos contra el Madrid es siempre complicado de digerir. Y si además se trata de que el Barcelona visite El Sadar, el engorro es mayúsculo. La imagen que los azulgranas, lastrados por la irrelevancia de algunos futbolistas en determinadas posiciones y la presión alta de Osasuna, ofrecieron durante la primera hora larga de partido fue muy pobre.

3.- Vilanova, en un gesto valiente, optó por seguir rotando al equipo. Regresaron Jordi Alba y Tello —Xavi y Pedro se quedaron en el banquillo. Pero el problema estuvo en las posiciones de Cesc y Alexis. El de Arenys de Mar, por mucho que lo intente su técnico, no es Xavi, desconoce el puesto de interior, sólo se encuentra cómodo como llegador; y el chileno, insistimos, no es un extremo, se muestra incapaz de desbordar en espacios reducidos.

4.- A pesar de que el partido se le había complicado sobremanera, Vilanova no cambió el esquema. Siguió con los cuatro defensas en la cancha. Entraron Pedro, Xavi y Villa por Tello, Cesc e Iniesta; y Messi pasó a jugar más retrasado y Alexis de 9.

5.- Messi jugó uno de los peores partidos que se le recuerdan, torpe en el uno contra uno, eligiendo mal los pases a sus compañeros.... Pero con todo y con eso apareció para sellar los dos goles de la remontada. Los astros son así

viernes, 24 de agosto de 2012

El clásico más redondo del Barça en el Camp Nou desde la manita

1.- Barcelona-Real Madrid (Súpercopa de España, ida), 23 de agosto de 2012, 3-2 (Cristiano, Pedro, Messi -p-, Xavi y Di María)

2.- El Barcelona, desde el célebre 5-0 en noviembre de 2010, no se encontró tan cómodo en su estadio contra el Madrid como anoche. Desde entonces, los azulgranas, en los clásicos en el Camp Nou de Champions, Súpercopa, Copa y Liga, no acabaron de sentirse a gusto, de dar con su juego fluido, de someter a su rival.

3.- Vilanova insistió en la ortodoxia del 4-3-3 —las genialidades de Guardiola, como colocar a Alves de extremo, costará volver a verlas—. Alves y Adriano, aunque éste sin apenas subir, en los laterales, con Piqué y Mascherano en el centro; el mediocampo va a ser innegociable en los partidos grandes, con Busquets, Xavi y un Iniesta alejado definitivamente de la banda; y arriba, a la espera de Villa, Alexis, Messi y Pedro.

4.- Salvo en el primer cuarto de hora del segundo tiempo, el Barcelona, a partir de un increíble Busquets, monopolizó el balón. No fue un ciclón generando ocasiones en la portería de Casillas, pero llevó todo el peso del partido. El Madrid no tuvo nada que decir durante todo el choque, con sus cuatro atacantes desenchufados en la presión y la elaboración, sin profundidad en los laterales, sostenido únicamente por Ramos y Alonso.

5.- Se aprecia una diferencia entre Vilanova y Guardiola respecto a Alexis. El chileno ha dejado de realizar el trabajo sucio de los desmarques de ruptura de fuera a dentro. Ahora se ha instalado en la cal como un extremo al uso. Parece un error, puesto que entre la virtudes del Niño Maravilla no se encuentra el desborde. En ese sentido, jugadores como Tello o Deulofeu pueden ser más adecuados.

6.- El tercer gol del Barcelona es una obra de arte. Por detrás de la divisoria combinan de primeras Xavi, Messi y Busquets, que ve la arrancada de Iniesta por el carril del 10 con un pase asombroso. El hueco que deja Messi lo aprovecha Xavi, que sale disparado a la espera de encontrarse con el balón de Iniesta. El manchego, tras un eslalon, deja a su compañero solo ante Casillas, al que bate a placer.

7.- No tardarán los ventajistas en cebarse con Valdés tras su pifia final. Conviene recordar que muchos goles del Barcelona nacen de un primer pase arriesgado del de Hospitalet. Son los peajes del estilo.




lunes, 20 de agosto de 2012

Vilanova es Guardiola con chándal

1.- Barcelona-Real Sociedad (Liga, jornada 1), 19 de agosto de 2012, 5-1 (Puyol, Chori Castro, Messi, Messi, Pedro y Villa)

2.- El estreno oficial de Tito Vilanova no pudo ser más continuista con la línea marcada por su predecesor. Todo en el Barcelona fue reconocible. Desde el dibujo a la presión, pasando por la importancia de Xavi y Messi, el espectador cerraba los ojos y se imaginaba a Pep Guardiola dando ódenes desde la banda.

3.- La primera decisión de Vilanova fue valiente. Pensó más allá del partido de anoche, le esperan al Barcelona dos choques contra el Madrid en la Supercopa, y no quiso quemar a Iniesta, Piqué y Alexis.

4.- Se desplegó el Barcelona a partir de un 4-3-3 muy claro, pero con Alves y Alba incorporados permanentemente al ataque y con Puyol y Mascherano plantados en la divisoria; Xavi, Busquets y Cesc en la creación; y arriba Pedro y Tello muy abiertos con Messi apareciendo por todas partes.

5.- Desde el primer minuto la intensidad fue máxima, tanto a la hora de circular el balón como de recuperarlo. A partir de la clarividencia de un fresquísimo Xavi y de la autopista que se creó un descomunal Tello en el costado izquierdo, el juego del Barcelona, con un Messi muy participativo, fluyó con una facilidad pasmosa tratándose del primer encuentro de la temporada.

6.- La noche se redondeó para el Barcelona en la segunda parte, con el gol de Villa, a los pocos minutos de reaparecer ocho meses después de su último partido.

7.- Más allá del resultado, incluso del juego, la mejor noticia para los azulgranas es que las sensaciones son muy claras, nada ha cambiado. Ni en el fondo ni en las formas. La vida sigue igual.

martes, 3 de julio de 2012

Y Xavi resucitó

1.- España-Italia (Eurocopa, final), 1 de julio de 2012, 4-0 (Silva, Alba, Torres y Mata)

2.- España esperó a la final para romper definitivamente a jugar al fútbol. Liberada, sin el agarrotamiento y la excesiva presión con la que disputó los partidos anteriores, el conjunto de Del Bosque fue más reconocible que nunca.

3.- En ese sentido, el resurgimiento de Xavi fue capital. El egarense, invisible toda la Eurocopa, marcó el ritmo del encuentro. Encontró por fin su sitio, tanto en la conexión trasera con Busquets y Xabi Alonso, como en la delantera con Silva, Cesc e Iniesta. Fue el Xavi de toda la vida, participando en todas las zonas del campo, dando siempre el pase adecuado, acelerando y ralentizando el juego cuando convenía, protegiendo el balón como si fuera un tesoro e interviniendo decisivamente en los goles.

4.- Alrededor de Xavi, tocaban y volvían a tocar, con más dinamismo y frescura que en los choques que precedieron a la final, todos sus compañeros, con una armonía y sincronización casi insuperables. El tan criticado desde estas líneas doble pivote merece un capítulo aparte. Alonso y Busquets han acabado por entenderse, por no estorbarse, por sumar uno más uno igual a dos. Mérito de Del Bosque, testarudo por naturaleza.

5.- Italia fue un digno rival. El único equipo que se atrevió a jugar a España cara a cara. Tal vez eso, su presión adelantada, su valentía a la hora de querer hincarle el diente a los de Del Bosque, facilitó la labor de España, más cómoda que nunca con espacios una vez superada la primera línea azzurra. Pero es que todos, más tarde o más temprano, los valientes y los cobardes, acaban sepultados por la propuesta eterna de esta selección española. Le sucedió a Francia en el primer tiempo, a pesar de que su entrenador se quiso proteger al dejar en el banquillo a jugadores de clase para colocar a dos laterales derechos; y le pasó a Portugal en la prórroga, a la que llegó exhausta tras no parar de correr y de cerrar huecos en los primeros 90 minutos.

6.- Interesante evolución de España en el campeonato. Lo que desde fuera nos parecía una renuncia de Del Bosque al estilo, no era más que un modo de proteger el delicado estado físico de los jugadores, a los que se les impidió dar un solo paso de más. De ahí la sensación inicial de ir con el freno de mano echado. Es cierto que tal vez hubo algún error, como no dar descanso a las vacas sagradas en ningún momento, infrautilizando de esa manera recursos como Cazorla, Mata, Pedro o Llorente; o el cante de Negredo ante Portugal. Pero Del Bosque priorizó primero lo competitivo, sin alardes, pero siempre con el balón, para al final posibilitar la explosión de juego durante muchos minutos contra Francia, en la prórroga contra Portugal y en la final contra Italia.

6.- Lo que han conseguido estos jugadores se valorará en su justa medida con el paso del tiempo. Todavía es pronto para ser conscientes del logro. No es tanto por los títulos, que también, sino porque los triunfos son consecuencia de una propuesta muy concreta de juego, con el balón como único protagonista, sin coartadas, sin pensar en rival, creyendo siempre que la victoria sólo tiene un camino...

jueves, 28 de junio de 2012

Las dos caras de Del Bosque

1.- España-Portugal (Eurocopa, semifinales), 27 de junio de 2012, 0-0 (España gana 4-2 en la tanda de penaltis)

2.- Partido con mucha miga, mal jugado, muy mal jugado por España en los primeros 90 minutos, pero solventado en la tanta de penaltis, como ocurriera en la anterior Eurocopa contra Italia, con Casillas y Cesc como protagonistas, con permiso de Sergio Ramos, que realizó el encuentro de su vida, coronado con un lanzamiento a lo Panenka.

3.- Entre esos primeros 90 minutos y la lotería final, en la prórroga, España se reencontró con su juego, con su idea, con sus valores. Fue ahí, en esa media hora, donde legitimó su victoria. Ganó en los penaltis, pero se puede agarrar a esos momentos de gran fútbol.

4.- Lo que ocurrió anteriormente fueron los peores minutos de España en los últimos ocho años. Desde los tiempos del infausto Iñaki Sáez los futbolistas españoles no ofrecían una imagen tan pobre. Es cierto que Portugal, un portento físico, dureza máxima en todas las acciones y con un Cristiano en erupción, era una seria amenaza. Pero los problemas que mostró España tuvieron más que ver con los miedos de Del Bosque que con otra cosa.

5.- Todo comenzó en la alineación. Del Bosque, cuando menos se esperaba, dio un giro a los principios que han informado a esta selección desde hace unos años, que se basan en la elaboración paciente del juego, y apostó por tirar balones largos a un tanque como Negredo. El naufragio fue evidente. España no existía. No pasaba apuros, puesto que Casillas no llegó a realizar ninguna parada de mérito, pero se desentendió del juego.

6.- A todos los males que se han venido denunciando desde estas líneas —falta de jugadores por delante del balón debido por culpa del doble pivote; jugadores como Xavi y Silva sin gasolina; mentalidad excesivamente conservadora a la hora de afrontar los partidos...— España padeció de manera añadida la pérdida de identidad. Asistimos a su desnaturalización. No se sabía a dónde quería ir. Los ataques eran de una vacuidad desesperante, con Iniesta, el único jugador con capacidad de desequilibrar, orillado en la banda izquierda, sin influir en el juego. El miedo a no dejar espacios a los puñales portugueses se imponía sobre la voluntad de defender un estilo de juego.

7.- Pero Del Bosque, esto hay que reconocérselo, sabe rectificar. La entrada de Cesc por Negredo ofreció algo más de elaboración al juego de España. Y las de Navas por Silva y Pedro por Xavi lograron q el campo se ensanchara y que, por tanto, Iniesta pudiera aparecer por dentro. Fue entonces cuando se vio la verdadera versión de España. Se hizo con el control del partido, metió a Portugal en su campo y comenzó a generar juego por dentro para acabar por fuera; con Piqué y Ramos plantados en la divisoria; con Xabi Alonso y Busquets barriendo todos los balones; con Navas y, particularmente, Jordi Alba, ganando la línea de fondo; con Pedro revoloteando y agitando el partido. Las ocasiones, las primeras del encuentro, aparecían en la prórroga.

8.- Fue ahí cuando España recuperó las esencias, legitimó su victoria y justificó su candidatura de cara a la complicada final que le espera. Pero Del Bosque no puede seguir traicionando la herencia que recibió. A costa de ser cada día más competitiva, España correr el riesgo de acabar siendo cualquier cosa.


domingo, 24 de junio de 2012

ADN España

1.- España-Francia (Eurocopa, cuartos de final), 23 de junio de 2012, 2-0 (Xabi Alonso y Xabi Alonso -p-)


2.- Con el paso del tiempo y de los partidos, poco a poco, Del Bosque va creando un modelo de juego en la selección. Esa idea cada vez se aleja más del Barça. No es que se haya optado por el camino opuesto, ni mucho menos, pero sí están surgiendo una serie de matices que desdibujan la propuesta azulgrana. No es ya el doble pivote, ceder toda la banda derecha a un inoperante Arbeloa o hacer de Xavi un jugador invisible, sin ningún peso...


3.- El problema es que la idea fundamental es parapetarse bien, no regalar nada al rival, arriesgar lo mínimo... a costa de no tener suficientes efectivos por delante del balón. Eso se traduce en un juego demasiado horizontal, sin apenas aceleraciones,sin buscar líneas de pase verticales... Es la idea que ha inculcado Del Bosque. Protección, calma, control, no conceder ocasiones —a cambio, eso sí, de no crearlas.


4.- No es tanto una cuestión de nombres ni de disposición, que en buena medida también lo es, como de mentalidad. España no sale a arrollar. Le falta un punto de efervescencia, de agresividad. Que durante todo el primer tiempo meta a Francia en su campo y abuse de la posesión del balón es algo que, en un equipo con Iniesta, Silva, Cesc, Xavi, Xabi Alonso, Busquets... se daba por supuesto. Pero le falta una vuelta de tuerca para materializar en ocasiones y en una mayor presencia en el área rival esa superioridad técnica sobre todos sus contrincantes. Lloris, el meta francés, fue un espectador privilegiado.


5.- Pero la España de Del Bosque es un equipo que se ha especializado en trastocar el sistema nervioso de sus oponentes, que se ven incapaces de salir del letargo al que les somete la pléyade de centrocampistas españoles. No apabullan, pero minan lentamente, gota a gota, la resistencia del enemigo, que acaba exhausto tras haber perseguido sombras todo el partido.


6.- España, en la segunda parte, aunque no pasó grandes apuros, ya sí que no estuvo bien. No sólo siguió sin crear ocasiones, sino que reculó veinte metros y perdió por momentos el hilo del partido y del juego. El desplome físico de algunos jugadores, con Xavi y Silva a la cabeza, es alarmante.


7.- Jordi Alba es el gran descubrimiento de esta Eurocopa, que le está sirviendo para presentarse en sociedad. Es un puñal en la banda izquierda, con muchísimo recorrido; se asocia muy bien por dentro, es capaz de darle continuidad al juego; y, a pesar de sus continuas incorporaciones, es raro que le ganen la espalda, que sufra en defensa. Irreprochable su contribución.


8.- Aun con todos los reproches a la España de Del Bosque, no debemos perder la perspectiva. Estamos ante un equipo monumental, extremadamente competitivo, tal vez sin el encanto de versiones pretéritas, pero de una fiabilidad máxima, siempre con el balón como protagonista, con un gusto por la elaboración digno de elogio. Y que genera pavor en sus rivales, hasta el punto de que cambian su estilo para intentar contrarrestar, vanamente, las mejores virtudes de la selección española.





martes, 19 de junio de 2012

La España del freno de mano

1.- España-Croacia (Eurocopa, tercer partido de la primera fase), 18 de junio de 2012, 1-0 (Navas)

2.- No era un partido a vida o muerte. Valía el empate. Y eso fue lo que agarrotó a España, que no supo si atacar o defender, si ir a por el partido o protegerse, si subir o bajar. Esas dudas estuvieron a punto de costar la eliminación a la selección de Del Bosque. En algunas fases de la segunda parte, ante la sensación de inminencia de un gol croata, el miedo se apoderó del equipo. Y de los aficionados.

3.- No le ayudó a España, y nos tememos que ese va a ser el caballo de batalla del campeonato, la insistencia en el doble pivote de su entrenador. Si se quiere jugar como el Barça es fundamental no vulnerar el principio tal vez más importante de su modelo: jugar con un único mediocentro. Cuando un equipo como Croacia se cierra en su campo, se hace todavía más evidente la redundancia de jugar con Busquets y Xabi Alonso juntos. España controla sobradamente el juego, pero echa de menos a más hombres por delante del balón.

4.- Y el que más se resiente es Xavi. Con esta propuesta es un Xavi menor. No encuentra su lugar en el campo. Carece de peso en el partido. Nunca se le había visto tan desubicado.

5.- Resulta complicado hacer daño al rival cuando, por mucha posesión que se tenga, únicamente hay tres jugadores —Silva, Torres e Iniesta; cuatro con las subidas de Jordi Alba; Arbeloa, ante defensas cerradas, es un grave problema para España— que pueden recibir el balón de tres cuartos hacia delante.

6.- En esas circunstancias, ante un rival tan metido atrás, el juego de España se vuelve excesivamente plano e inocuo. Quitar a un pivote a cambio de un futbolista como Cazorla o Mata sería la solución. Recordemos que esta temporada el Barcelona ha jugado muchos partidos con Xavi, Iniesta, Cesc, dos extremos y Messi por delante del pivote. Poder, se puede.

7.- España sólo respiró en el tramo final. Los croatas, entre que necesitaban la victoria y que ya estaban maduritos, comenzaron a dejar muchos huecos. Cesc, que entró por Torres, no los desaprovechó. Conectó con Iniesta, el mejor futbolista del torneo, en varias ocasiones hasta que llegó el gol final de Navas.

8.- La calidad individual de España es tan grande que, a pesar de que Del Bosque insista en una propuesta de alguna manera tan contra natura, no cuesta imaginarse a Casillas levantando el 1 de julio el título.

viernes, 15 de junio de 2012

España se gusta ante Irlanda

1.- España-Irlanda (Eurocopa, segundo partido de la primera fase), 14 de junio de 2012, 4-0 (Torres, Silva, Torres y Cesc)

2.- España rompió a jugar. En la línea de la segunda parte ante Italia. Del Bosque repitió con Busquets y Alonso, pero optó por un 9 clásico y por abrir el campo con los laterales. Los dos centrales se colocaron en la divisoria y a partir de ahí el equipo se mostró muy junto y compacto.

3.- El juego fluyó durante los noventa minutos. Busquets echaba una mano a Piqué y a Ramos. Por delante Xavi y Xabi Alonso se adueñaron del balón. Arbeloa y Jordi Alba estiraron el campo. Y Torres no paró de tirar desmarques que facilitaban los espacios a Iniesta y Silva.

4.- Esta vez Busquets y Xabi Alonso mezclaron bien. El barcelonista en el eje y el madridista más descolgado. No es la posición ideal del tolosarra, hay en la selección jugadores que pueden ejercer esa función con más naturalidad, pero al menos es una manera de evitar que los dos pivotes jueguen en paralelo, con el cortocircuito que eso genera en el movimiento del balón.

5.- Probablemente fue el mejor partido de Torres, al margen de sus dos goles, con España. Es un vendaval desmarcándose en profundidad. Un alivio para los centrocampistas, que encuentran constantes líneas de pase.

6.- Eso sí, el gol de Silva, un prodigio de pausa y tranquilidad en el área pequeña, es el gol que El Niño, siempre acelerado cuando le toca pensar, nunca podrá marcar.

7.- Pero la clave de todo, un factor que de primeras se obvió frente a Italia, fue ensanchar el campo. La labor en ese sentido de Alba y, especialmente, de Arbeloa, incorporándose al espacio en los momentos adecuados; llegando, no estando; partiendo siempre desde el medio campo, como dos interiores más; ayudando en la elaboración; emulando los mejores tiempos de Abidal y Alves, fue encomiable.

8.- Y el estado del césped. Tal vez el mayor rival de los de Del Bosque cuando está alto y seco. Ayer fue una alfombra. Si siempre está así será complicado frenar a España.

lunes, 11 de junio de 2012

Uno más uno igual a uno

1.- España-Italia (Eurocopa, primer partido de la primera fase), 10 de junio de 2012, 1-1 (Cesc y Di Natale)

2.- Claroscuros en el debut de España en la Eurocopa. Una primera parte en la que apenas fue reconocible y un segundo tiempo en el que se corrigieron algunos aspectos. Del Bosque adoptó dos decisiones importantes: jugar con Cesc como falso 9 y reincidir con Busquets y Xabi Alonso juntos. Lo primero acercaba la selección al Barça, lo segundo la alejaba de manera abismal.

3.- Aunque España ganó el Mundial con ese doble pivote, el juego no fue tan fluido como en la Eurocopa de 2008 cuando Luis Aragonés alineaba a un único mediocentro, Marcos Senna. Duele ver a Busquets escorado en el costado derecho, corriendo de un lado para otro. El equipo pierde naturalidad, es todo muy forzado.

4.- A partir de semejante desperdicio, de la imposibilidad de que mezclen Xabi Alonso y Busquets, se puede explicar el desorden de España en la primera parte. El equipo fue muy largo; Piqué y Ramos en el eje central de la defensa no conectaban con el medio campo; los laterales estaban demasiado atrás; Xavi no encontraba su sitio, muy alejado de las zonas de influencia; y de los tres de arriba, Silva, Cesc e Iniesta, únicamente el manchego tenía peso en el juego, era el único futbolista español que se sentía a gusto.

5.- Tras la reanudación cambió el panorama. Del Bosque colocó a Busquets en el eje, con Xabi Alonso un poco más adelantado; los laterales se incrustaron en la divisoria y empezaron a llegar al campo rival, Jordi Alba en particular; e Iniesta, Xavi y Cesc lograron asociarse con más frecuencia. No era el mejor partido de España pero al menos era una España reconocible.

6.- El gol de Italia, generado a raíz de los huecos que surgían a la espalda de los laterales, no alteró el guión que ya tenía el partido: control de la situación por parte de la selección española. El empaté no tardó en llegar. Iniesta conectó con Silva, que vio el desmarque de Cesc por el centro y le filtró un precioso pase con el exterior de su pie izquierdo. Se estaba reclamando que el problema de España era que le faltaba un 9 y resulta que marca el hombre que ocupó esa posición.

7.- La entrada de Torres hizo que España comenzase a generar ocasiones con más asiduidad. Italia dejaba más espacios que al comienzo del partido y ahí El Niño es letal. Sus desmarques por velocidad y potencia son una bendición para los centrocampistas. Lástima que le entre un ataque de pánico cada vez que encara la portería rival. Las tres ocasiones de las que dispuso las resolvió de manera muy equivocada.

8.- Partido del que Del Bosque debería sacar interesantes conclusiones. Volver, desde el banquillo, a insistir en el próximo encuentro en los errores que se cometieron contra Italia, sería algo muy decepcionante.




sábado, 26 de mayo de 2012

Guardiola deja un último recuerdo de media hora

1.- Athletic-Barcelona (Copa, Final), 25 de mayo de 2012, 0-3 (Pedro, Messi y Pedro)

2.- Guardiola se despidió definitivamente con una de las mejores versiones del Barça de estas cuatro temporadas. Fueron unos primeros veinticuatro minutos, hasta el tercer y definitivo gol, apabullantes. Volvió el Barcelona de Xavi —control absoluto del juego, en cualquier parte del campo—  y de Iniesta —con su recuperada exuberancia para romper líneas, ya conduciendo, ya pasando el balón—; volvió la presión asfixiante de todo el equipo tras pérdida de la pelota; volvió el efervescente y eléctrico Pedro estirando el campo; volvió Piqué, el mariscal de antaño, ofreciendo una salida del esférico siempre limpia; y Messi no volvió porque nunca se fue, pero el equipo no necesitó de su mejor versión para desplegar uno de los momentos cumbres del Pep Team.

3.- No hubo final, tal fue el atropello al que sometió el Barcelona al Athletic desde el primer minuto. El descanso de dos semanas —en realidad de casi un mes, desde la eliminación ante el Chelsea— le sentó de maravilla a los jugadores azulgranas. Demasiada frescura de piernas y mente para unos leones que a estas alturas de una temporada de desgaste increíble no pasaban de gatitos.

4.- Guardiola fue muy clásico en el planteamiento. Se despidió con un 4-3-3, el dibujo que le llevó a ganar los títulos más lustrosos. El emotivo planteamiento de los tres defensas —recuerdos imborrables de Chamartín y contra el Santos— quedó guardado en el cajón. No sabemos, Tito mediante, si de manera definitiva.

5.- Han sido cuatro años plenos de juego, de fútbol llevado a su máxima expresión, a cotas que tal vez nunca antes se habían alcanzado. Una propuesta que Guardiola consideraba irrenunciable para llegar al éxito. La vía más rápida y sencilla. Jamás nadie ganó tanto. De diecinueve títulos, Guardiola logró catorce. Únicamente el Sevilla en la Copa de 2010, el Inter en la Champions de 2010, el Madrid en la Copa de 2011, el Madrid en la Liga de 2012 y el Chelsea en la Champions de 2012 consiguieron que el Barcelona doblara la rodilla. Pero en todas esas ocasiones cayó con dignidad, sin traicionarse a sí mismo, superando a su rival en juego, en posesión y en ocasiones.

6.- Se habla más de lo debido de que en el fútbol lo importante es que entre la pelotita, de que sólo vale ganar. Pues ahí lo tienen, catorce de diecinueve. No cabe mayor pragmatismo que el de Guardiola, el filósofo acusado de talibán de una idea unívoca del fútbol; el idealista al que no se le tiene por un técnico ganador. ¿Querían resultados? Dos Champions, tres Ligas, dos Copas del Rey, dos Mundiales de Clubes, dos Súpercopas de Europa y tres Súpercopas de España. Y todavía seguiremos escuchando que para ganar es necesario renunciar a las sutilezas del juego. Es complicado luchar contra los tópicos. Y contra los fubolísticos, imposible.

7.- La inmensa mayoría de aficionados del Barcelona y del Athletic, al igual que en 2009 en la final de Valencia, pitaron estentóreamente el himno nacional. Nada que reprochar. Son nacionalistas, desean la separación de Cataluña y de las Provincias Vascongadas del resto de España. Están en su derecho de silbar. Es más, es su obligación comportarse así. El problema lo tenemos en Madrid. Nadie ha hecho más por el separatismo vasco y catalán que la capital de España. La falta de coraje político, los complejos atenazantes y la complacencia con el enemigo son más peligrosos que todos los nacionalistas juntos.

domingo, 13 de mayo de 2012

Triste despedida

1.- Betis-Barcelona (Liga, Jornada 38), 12 de mayo de 2012, 2-2 (Busquets, Castro, Castro y Keita)

2.- Último partido de Guardiola en la Liga. Es curioso que el entrenador que más ha ganado debutara con una derrota en Soria contra el Numancia y se despida con un empate en Sevilla contra el Betis. Entre medias, un sinfín de victorias, todas ellas consecuencia del juego, del balón.

3.- Este último encuentro, más allá de cuestiones futbolísticas, será recordado por el triste gesto de Guardiola. Ensimismado en la soledad del banquillo —a pesar, o tal vez por eso, de la presencia a escasos centímetros de Tito Vilanova—, la cara del de Santpedor era la de un hombre agotado por la tensión acumulada de cinco temporadas, la de un líder exhausto, la de quien soporta una losa que está a punto de acabar con él... Su lacónica rueda de prensa posterior corroboró esas sensaciones.

4.- El partido no sirvió para gran cosa, salvo para demostrar nuevamente que Alves debe ser traspasado. Su absurda expulsión precipitó la remontada bética. La salida del brasileño tiene que suponer para Vilanova lo que en su momento significaron las marchas de Ronaldinho y Deco para Guardiola: un golpe de autoridad.

5.- De cara a final de Copa frente al Athletic el encuentro no dejó excesivas conclusiones. Guardiola desplegó un clásico 4-3-3 que sirvió para controlar el primer tiempo y que se desmoronó con la expulsión de Alves. Las mejores sensaciones las dejaron Busquets, el recuperado Xavi y un Pedro eléctrico por momentos. Por contra, Piqué estuvo torpe y lento, impotente en los goles verdiblancos.




domingo, 6 de mayo de 2012

El Barça no perderá a Guardiola

1.- Barcelona-Español (Liga, Jornada 37), 5 de mayo de 2012, 4-0 (Messi, Messi -p-, Messi y Messi -p-)

2.- Despedida de Guardiola del Camp Nou y Messi llega a los 50 goles en la Liga, 72 entre todas las competiciones. Dos nombres necesariamente unidos. Tal vez Guardiola no habría llegado tan lejos sin Messi, y es seguro que Messi sería un jugador muy diferente —y peor— de no haberse cruzado con Guardiola.

3.- Finalizado el partido, Guardiola se dirigió al centro del campo, dónde si no, y pronunció las siguientes palabras: "Gracias a la vida por hacerme este regalo. Yo he sido un privilegiado igual que vosotros pero un poco más cerca de estos fantásticos jugadores. No sabéis el cariño que me llevo. Sentirse así de querido durante 4 y 5 años... No sabéis la felicidad que me llevo. Gracias a todos. Sobre todo a los más cercanos que han trabajado para que pudiérais pasar un buen rato viendo futbol cada día. Os hemos sentido muy cerca. Que sepáis que os echaré mucho de menos. El que más pierdo en todo esto soy yo. Pero os dejo en las mejores manos. El cinturón apretaba mucho y yo me lo descuelgo pero vosotros no hace falta que lo hagáis. Esto tendrá larga vida. Hasta pronto. No me perderéis nunca".

4.- Cuesta creer que Guardiola vaya a entrenar a otro equipo. Verle dirigiendo a un rival del Barcelona, enfrentarse a su gente, suena raro. Muy raro. Tal vez su destino más probable sea suceder a Rosell en la presidencia, con Tito Vilanova de director técnico y Xavi Hernández de entrenador.

5.- El partido nos dejó el último 3-4-3 en el Camp Nou de la era Guardiola. Fue en la segunda parte: Montoya, Mascherano, Puyol; Busquets, Thiago, Keita, Iniesta; Pedro, Messi y Adriano. Veremos si Vilanova sigue profundizando en esa línea.




jueves, 3 de mayo de 2012

El Barça no se destensa pensando en la Copa

1.- Barcelona-Málaga (Liga, Jornada 20), 2 de mayo de 2012, 4-1 (Puyol, Rondón, Messi -p-, Messi -p- y Messi)

2.- El Barcelona, sin nada en juego más allá del récord de Messi, se impuso sin mayores complicaciones al tercer clasificado, el Málaga de Pellegrini, que se jugaba la Champions. Un equipo que, al igual que el Rayo hace unos días, fue atrevido en el planteamiento y salió a presionar a los azulgrana. Y de la misma manera que en Vallecas, aunque con menos facilidad, el Barcelona encontró los espacios necesarios.

3.- El cuestionado Alves recuperó la titularidad. Pero es un jugador que cada vez rechina más en este Barcelona. Va por libre. En un equipo donde el balón es un tesoro que se protege por encima de todo, Alves lo expone sin disimulo. Quita más de lo que da.

4.- Adriano, desde la discreción, se consolida como lateral izquierdo. Keita se incrustó entre los centrales, Puyol y Mascherano, para dar salida al balón. Por delante Cesc y un recuperado, tras flojear ante el Madrid y el Chelsea, Iniesta. Y arriba el mejor Pedro del año, Messi y Cuenca.

5.- Messi, con dos goles de penalti y otro tras una deliciosa acción en la que Iniesta aprovechó lo adelantada que estaba la defensa del Málaga para filtrar un pase perfecto, batió el registro de los 67 goles de Torpedo Muller con el Bayern en la temporada 1972/73.

6.- Incomprensibles, inesperadas e impropias declaraciones de Guardiola en la rueda de prensa. Felicitó al Madrid por el título de Liga pero con matices. Dijo que este año han pasado muchísimas cosas y que el Barcelona ha guardado demasiados silencios. Este Guardiola mouriñizado no es nuestro Guardiola.

lunes, 30 de abril de 2012

Homenaje a Guardiola

1.- Rayo Vallecano-Barcelona (Liga, Jornada 36), 29 de abril de 2012, 0-7 (Messi, p.p., Keita, Pedro, Thiago, Pedro y Messi)

2.- Guardiola recibió anoche, tras el anuncio de su adiós el viernes, un homenaje de fútbol y goles. Los jugadores azulgrana, a pesar de tener la Liga perdida con la victoria matutina del Madrid, no quisieron decepcionar a su entrenador, a quien tanto deben.

3.- Había cierto interés en cuál iba a ser la reacción del equipo después de la derrota ante el Madrid, la eliminación frente al Chelsea, la decisión de Guardiola de no continuar la próxima temporada y la cesión del testigo a Tito Vilanova. Pues bien, la respuesta fue impecable. A partir de un 4-3-3 el Barcelona desplegó un fútbol fresco y ágil. Tras afrontar batallas contra los muros que blancos y blues habían plantado en los partidos precedentes, el Rayo presionó arriba, como es costumbre en Sandoval, y dejó unos espacios que fueron una bendición para el Barcelona.

4.- También contribuyó a la frescura del juego del Barça la utilización de jugadores descansados, como Montoya, Adriano, Keita, Thiago y Pedro. El centro de la defensa fue ocupado por Mascherano y Puyol, el eje por Busquets. Arriba Alexis volvió al extremo izquierdo y Messi al falso nueve.

5.- Se abre un nuevo tramo de la temporada para el Barcelona, con tres partidos de Liga por delante para, más allá del pichichi de Messi o el zamora de Valdés, preparar la final de Copa contra el Athletic de Bielsa.

6.- Lamentable el bailecito de Thiago y Alves tras el gol del primero. El lateral brasileño, por su forma de ser e incluso de jugar, es un elemento discordante en el ecosistema que se ha ido generando en el Barcelona desde la llegada de Guardiola hace cuatro años. Las tijeras de Vilanova se vuelven imprescindibles.

miércoles, 25 de abril de 2012

Víctima de su grandeza

1.- Barcelona-Chelsea (Champions, semifinales, vuelta), 24 de abril de 2012, 2-2 (Busquets, Iniesta, Ramires y Torres).

2.- El Barcelona ha muerto de éxito. En apenas tres días ha dicho adiós a la Liga y a la Champions, víctima en ambos caso de su grandeza. Este Barcelona —y ahí reside su gran legado, más allá de los títulos— es probablemente el único equipo de la historia reciente del fútbol que genera en sus rivales una legitimidad para poner en práctica cualquier tipo de planteamiento, por muy aberrante que sea. Anoche, durante buena parte del encuentro, los jugadores del Chelsea, y no es ninguna metáfora, se instalaron al borde de su área. Y de ahí no se movieron.

3.- Poco, por no decir nada, se le puede reprochar al Barcelona. Entre el partido de ida y el de vuelta sumó cuarenta y siete disparos, trece de ellos a puerta y cuatro al palo. El Chelsea, en cambio, tiró tres veces y marcó tres goles, todos ellos en minutos de descuento. Es cierto que no estuvimos ante la versión más afilada del Barcelona, ni ante el Messi más preclaro, ni ante un chorreo constante de ocasiones . Pero poco margen dejaba un Chelsea literalmente encerrado en su área.

4.- La alineación de Guardiola fue ejemplar. Guardiola en su máxima expresión. Tras la derrota frente al Madrid el periodismo resultadista, valga la redundancia, se ensañó con su propuesta. Pues si no queríais taza, taza y media, debió de pensar el de Santpedor. Otra vez defensa de tres, de nuevo un extremo sin experiencia en estos partidos y Alves al banquillo. Más valiente no se podía ser: Mascherano, Piqué, Puyol; Xavi, Busquets, Cesc; Messi; Cuenca, Alexis e Iniesta.

5.- Todo iba bien —dos goles arriba, expulsión de Terry, sensación de goleada...— hasta el último suspiro de la primera parte, gol a la contra del Chelsea, y el primero de la segunda, penalti fallado por Messi. A partir de ahí, aunque el guión del partido siguió siendo exactamente el mismo, el Barcelona se tensionó en exceso. Tal vez careció de la debida finura para desentrañar una defensa tan exigente, siquiera por el apelotonamiento de jugadores. Posiblemnete les faltó a los de Guardiola un poco más de aplomo.

6.- Los ataques del Barcelona —y la defensa del Chelsea—remitían más a un partido de balonmano que a un encuentro de fútbol. El balón circulaba de un lado a otro en torno al área que vigilaba Peter Cech.

7.- Ya habrá tiempo de analizar las derivadas de la eliminación —y del título de Liga que se llevará el Madrid—. Ahora mismo sólo cabe que el barcelonismo sienta un profundo orgullo por la figura, por lo que representa en términos futbolísticos, de Josep Guardiola Sala.


domingo, 22 de abril de 2012

El Barcelona es un incomprendido

1.- Barcelona-Madrid (Liga, Jornada 35), 21 de abril de 2012, 1-2 (Khedira, Alexis y Cristiano)

2.- No tardarán los apóstoles del pragmatismo, los mensajeros del todo vale para triunfar, los predicadores de que el fin justifica los medios, en cuestionar el modelo Barça. Repararán únicamente en el marcador. Les bastará el resultado final para hacer el análisis de lo sucedido, obviando lo acontecido durante los noventa minutos.

3.- Se pasará por alto que el clásico de anoche tenía un guión muy claro: control absoluto del balón por parte del Barcelona y planteamiento ultraconservador del Madrid, con sus diez jugadores de campo alejados de la portería de Casillas pero siempre por detrás de la medular, esperando a su rival. Y que los goles del Madrid llegaron fuera de guión, en particular el segundo, la contra de Cristiano que valió una Liga justo en el momento en que su equipo iba a afrontar unos eternos veinticinco minutos finales, con un Barcelona, tras el empate, en la situación ideal de volcar el partido y el campeonato.

4.- No se puede pasar por alto, eso sí, que el Madrid ejecutó a la perfección la propuesta de su entrenador. Se jugó el partido donde quiso Mourinho, en una franja de apenas 20 metros, muy lejos de su área. En eso el Madrid estuvo impecable. Casillas probablemente disfrutó de uno de los partidos más plácidos del curso. Otra cuestión es si planteamientos de renuncia tan descarada a la posesión del esférico son admisibles en el mejor club del siglo XX y en el club con mayor presupuesto del XXI.

5.- Pero decíamos que el estilo Barça es un arcano para la mayoría del mundo futbolístico. Y en ese sentido nada peor que el propio entorno del club. No hay que ser muy listo para intuir por dónde irán los tiros los próximos días. Que si la defensa de tres, que si poner a chavales, que si demasiado juego horizontal, que si muchos riesgos innecesarios, que si la esterilidad de la posesión, que si la falta de pegada, que si no hay plan B... Son exactamente los mismos que, en caso de haber terminado el partido 2-1, habrían pedido la canonización de Guardiola.

6.- Nada se le puede reprochar al Barcelona. Es cierto que no generó su volumen de juego ni de ocasiones habitual. Pero enfrente tenía al mejor entrenador del mundo si de desactivar al contrario se trata. Salió Guardiola a lo grande: tres defensas —Puyol, Mascherano y Adriano—, dos extremos abiertos a más no poder —Alves y Tello— y cinco centrocampistas —Busquets, Thiago, Xavi, Iniesta y Messi.

7.- El Madrid se plantó con su equipo de gala, de nuevo con Coentrao a pesar del cante en Múnich; con Xabi y Khedira en el doble pivote; y arriba Di María en la derecha, Cristiano en la izquierda y Benzema y Ozil abarcando el frente de ataque.

8.- Sí se le puede achacar a Guardiola cierta espesura a la hora de darse cuenta de que su equipo pedía a gritos la presencia de un hombre por delante de Messi en detrimento de un centrocampista. Alexis entró demasiado tarde. Y, por otra parte, la presencia de Alves como extremo estático, incapaz de desbordar sin espacio, fue un lastre insoportable. Desde el comienzo de la segunda parte, un jugador como Cuenca, para ese cometido, con un Madrid tan agazapado y sin apenas amenazar, habría resultado más útil.

9.- El Madrid de Mourinho, más allá de la grosera asunción de inferioridad que exhibe en los enfrentamientos directos con el Barcelona, es el justo triunfador de esta Liga. Ha sido el mejor equipo desde septiembre, sin apenas altibajos.

jueves, 19 de abril de 2012

Los peajes de ser el Barcelona

1.- Chelsea-Barcelona (Champions, semifinales, ida), 18 de abril de 2012, 1-0 (Drogba)

2.- No es fácil ser el Barcelona. La vida con Xavi, Busquets, Iniesta y Messi interpretando cada noche una sinfonía de pases puede parecer llevadera, pero no existen las situaciones idílicas, siempre hay peajes. El equipo de Guardiola tiene que sobreponerse frecuentemente a equipos que sin ningún disimulo renuncian a jugar al fútbol y se limitan a destruir, a meter a todos sus jugadores en su propia área, a generar embudos a base de apelotonar hombres... Les da igual que planteamientos así vayan en contra del espíritu del fútbol, un deporte que se inventó para atacar, para tener el balón, para crear. La mayoría de entrenadores, con eso de que el Barcelona está a otro nivel, se autojustifican argumentando que no existe otra alternativa de enfrentarse a los azulgrana.

3.- Pero esos planteamientos tan mezquinos no garantizan nada. Lo habitual es que esos equipos acaben perdiendo igualmente. Ayer en Stamford Bridge, si no fue así, fue por pura casualidad. El Barcelona dominó abrumadoramente el balón, disparó dos veces a los palos, un balón a las nubes con la portería vacía, Cech intervino con mérito en varias ocasiones, hubo un par de despejes sobre la raya de gol... Y el Chelsea apenas llegó una vez a la portería de Valdés.

4.- El Barcelona de la primera mitad recordó al de San Siro. Control total del juego, numerosas ocasiones, mucha presencia interior de Busquets, Xavi y Messi, con Iniesta por la izquierda y Alexis por la derecha. Cesc, eso sí, estuvo tan desaparecido como en Milán, donde no jugó. Atrás defensa de cuatro —Alves, Puyol, Mascherano y Adriano—, los laterales muy arriba y Piqué en el banquillo.

5.- Pero al borde del descanso, el gol de Drogba, en una pérdida de Messi en la medular cuando Alves había dejado una autopista a sus espaldas, inquietó al Barcelona. La segunda parte tuvo el mismo guión pero con menos finura por parte de los azulgrana. Atenazados, les costó un mundo desentrañar el muro que había plantado Di Matteo en la frontal de su área.

6.- Y Guardiola no contribuyó a aclarar el panorama. Se equivocó de inicio en la colocación de Alexis, que en la banda derecha es inofensivo. Y en los cambios no estuvo fino. Pedro, evidentemente, no aportó nada y Cuenca debió haber saltado mucho antes al campo. El partido exigía extremos que estirasen bien el campo.

7.- Es la tercera derrota del Barcelona en este curso. Pero ésta, al contrario que las losas de Getafe y Osasuna, muy probablemente sea redimida el próximo martes en el Camp Nou, allí donde la anchura del terreno se convierte en la peor pesadilla de la ruindad.

domingo, 15 de abril de 2012

El mal trago habitual fuera de casa

1.- Levante-Barcelona (Liga, Jornada 34), 14 de abril de 2012, 1-2 (Messi y Messi-p-)

2.- No hay manera últimamente de que el Barcelona disfrute de un partido cómodo fuera de casa. Sus recientes salidas —Mallorca, Zaragoza y anoche ante el Levante— han sido un calco. Rivales encerrados en su área y dificultades del Barcelona para desarrollar su fútbol, para meterse de lleno en el partido.

3.- El planteamiento de Guardiola era irreprochable. Ante lo que se preveía, optó por abrir el campo con dos extremos —Alexis y Pedro—, por cerrar con tres —Puyol, Mascherano y Adriano— y por llenar la divisoria de centrocampistas —Busquets, Xavi, Thiago, Cesc y Messi. Descansaron, pensando en los próximos y decisivos tres partidos, Iniesta, Alves y Piqué, que ni viajó por precaución.

4.- Pero el equipo no acabó de cuajar, las posesiones eran de una esterilidad asombrosas y no había manera de que Messi se enchufara. Tal vez no ayudaba el hecho de que las bandas las ocupaban los jugadores equivocados. Alexis pierde muchísimos enteros alejado de las posiciones centrales y Pedro, no nos cansaremos de denunciarlo, no está.

5.- Guardiola, tras un primer tiempo inane y con un gol en contra, intervino. Entraron Cuenca, que ocupó el extremo derecho, por Xavi; e Iniesta por Pedro. Alexis pasó a jugar de nueve y Messi comenzó a aparecer. El protagonismo de los nuevos extremos fue considerable. Todas las jugadas acababan con un pase a Iniesta o, especialmente, a Cuenca, que estuvo presente en los dos goles.

6.- Cesc lleva unos partidos fuera de punto, muy intrascendente. Y haber jugado los noventa minutos tal vez indique que no sea titular contra el Chelsea y el Madrid. Thiago, en cambio, no decepciona en las oportunidades que le están surgiendo.

7.- Salvó los muebles el Barcelona, más por tesón y tozudez que por fútbol. La distancia que separa el Camp Nou del resto de estadios es una cuestión que va más allá de los kilómetros.

miércoles, 11 de abril de 2012

Una máquina perfecta

1.- Barcelona-Getafe (Liga, Jornada 33), 10 de abril de 2012, 4-0 (Alexis, Messi, Alexis y Pedro)

2.- Rotunda exhibición del Barcelona, que firmó un partido redondo de principio a fin. Los 90 minutos se jugaron en el campo del Getafe, que apenas pudo cruzar la divisoria en todo el encuentro.

3.- Guardiola optó por un 3-4-3. Puyol—único defensa puro en la alineación—, Mascherano y Adriano atrás; Busquets, Xavi, Iniesta y Messi en una medular de ensueño; y Cuenca, Alexis y Pedro arriba.

4.- Tal fue el ansia ofensiva del Barcelona que sus laterales, a pesar de que formaban una defensa de tres, se colocaron prácticamente en la línea de tres cuartos.

5.- Alexis, como indicábamos hace unos días, se siente más cómodo por dentro que en las bandas. Prueba de ello fueron sus dos estupendos goles, propios de un gran delantero.

6.- Messi se gustó especialmente jugando de enganche, tal vez la posición en la que se maximizan en mayor medida sus infinitas cualidades para jugar al fútbol. Aparece por cualquier lugar del campo y se asocia con Xavi e Iniesta de manera permanente.

7.- La clarividencia de Busquets es sobresaliente. Sus gestos, sus fintas con el cuerpo, la elección de sus pases, su colocación en el campo... son lecciones de fútbol


domingo, 8 de abril de 2012

Messi y diez más

1.- Zaragoza-Barcelona (Liga, Jornada 32), 7 de abril de 2012, 1-4 (Puyol, Messi, Messi -p- y Pedro)

2.- El Barcelona más oscuro y espeso, con la peor versión de algunos de sus jugadores, sin la presencia de los centrocampistas titulares, fue sostenido por La Pulga, el más grande, imparable a estas alturas de la temporada. Su protagonismo fue total. El Barcelona, en las tinieblas, se agarró a su luz. Fueron Messi y diez más.

3.- Guardiola optó, acertada pero sorprendentemente, por dar descanso a Busquets, Xavi e Iniesta. A esas ausencias había que sumar la baja por lesión de Piqué. Siempre es de agradecer esa valentía de Guardiola, ese pensar más allá del siguiente partido. Las opciones del Barcelona para lograr los tres títulos a los que todavía opta pasan por que sus mejores futbolistas, Messi aparte, estén frescos las próximas semanas. Pero no cabe duda de que Guardiola en La Romareda, donde esperaba a un correoso Zaragoza a pesar de su condición de colista, jugó con fuego.

4.- Porque Keita como mediocentro está a años luz de Busquets —el malí es un llegador, un fajador, un conductor... pero carece del sentido táctico y de los recursos técnicos que atesora el de Badía—; Cesc está todavía lejos de ser capaz de sostener al equipo, de llevar la manija del partido, de tener presencia continuada en el juego como Xavi; y Thiago, aunque va por el buen camino —y ayer fue el mejor de los tres—, no posee todavía el aplomo y la pausa de Iniesta.

5.- Otro problema para el Barcelona fueron sus extremos: Pedro y Alexis. El tinerfeño, obviando su gran movimiento en el cuarto gol, sigue sumido en la más profunda de las depresiones. En el mejor de los casos resulta intrascendente, muy alejado de la pujanza de Cuenca y Tello, quienes definitivamente le han superado. Y el Niño Maravilla lleva unos partidos fuera de punto. Da la sensación de que se encuentra más a gusto por el centro que en la banda, donde jugó ayer.

6.- Atrás, sin Piqué, le faltó a los azulgrana salida limpia del balón. Mascherano y Puyol no cerraron tan bien como últimamente, Alves estuvo muy apagado y Adriano, jugador confuso donde los haya, no debería ser titular en este Barcelona.

7.- Así las cosas, ni contra once ni contra diez —salvo en los últimos compases del partido—, consiguió el Barcelona someter al Zaragoza. Lo pasó mal al principio, dio la vuelta al marcador más por casualidad que por merecimiento y en ningún momento fue capaz de imponer su juego. Nada preocupante en estos momentos del curso, cuando es complicado mantener la excelencia cada tres días y los esfuerzos deben ser rigurosamente seleccionados.